Es decir, el AUTOCONSUMO en España está totalmente legalizado, y perfectamente regulado y normalizado en todos sus términos por la mencionada Ley y el Real Decreto que la desarrolla.
Y es una realidad imparable, una tendencia, que a pasitos de gigante va calando en la conciencia social. Constituye, junto con la movilidad eléctrica, el otro vector del cambio tan importante que estamos viviendo en nuestra sociedad moderna: una transición ecológica y energética.